La apuesta ambiental de Petro es una transcripción del programa «¿Qué Opinas?», de HispanTV, producido por dXmedio y difundido a través del canal internacional el 23 de noviembre de 2022.
Colombia es uno de los países con mayor biodiversidad en el mundo.
Por lo mismo, dada la variedad de los ecosistemas, también es uno de los más vulnerables al cambio climático.
El presidente Gustavo Petro representa un cambio profundo con respecto a las políticas precedentes en la materia.
El legado de los gobiernos anteriores es un pesado lastre con el que ya empieza a lidiar el nuevo Gobierno.
Anteponer la defensa de la vida a los intereses del capital constituye, sin la menor duda, una propuesta novedosa en un país en el que la vida ha valido poco o nada.
¿Qué sabes del cambio climático?
Colombia enfrenta numerosos retos ambientales. Poderosos intereses económicos, legales e ilegales, están detrás del bloqueo a los intentos de preservar el medio ambiente. La desigualdad en la tenencia de la tierra y del agua es arraigada.
La deforestación crece sin control en la Amazonía, al igual que en otras regiones. La ganadería extensiva es implacable. Los sectores extractivos son poderosos. Se intensifican las actividades económicas ilegales, como la minería y el cultivo de hoja de coca.
La oposición e intransigencia de los sectores opuestos a cualquier transformación se manifiesta en el asesinato y persecución de los líderes ambientales. Colombia es el país más peligroso para el este liderazgo en el mundo, según la organización estadounidense Global Whitness.
Son muchos y variados, pues, los retos ambientales del país.
¿Cuáles son los mayores retos ambientales de Colombia?
Cada que pudo y, sobre todo, en los escenarios internacionales, el expresidente Iván Duque se declaró como “el defensor del medio ambiente”. A decir verdad, la realidad fue otra, bien distinta.
La deforestación creció. Defendió el fracking. Autorizó el uso del glifosato. Las fronteras agrícola y ganadera aumentaron, y el incendio provocado de bosques, la obligada fase previa, fue descontrolado.
Para enfrentar el mal de la deforestación, la estrategia de Duque fue la operación Artemisa, es decir, enviar más militares. Guerra es lo que hubo y nada fue lo que logró. Pero Iván Duque no es un fenómeno aislado.
Ni en lo colectivo ni en lo individual puede haber consciencia ambiental en un país que nunca ha destinado recursos para el conocimiento de los temas y las ciencias ambientales.
En Colombia, ¿hay conciencia ambiental?
Colombia, desde que es república, ha sido sometida a la explotación incontrolada de sus recursos.
La justicia ambiental ha estado ausente del debate y las prioridades oficiales.
El nuevo Gobierno apunta a efectuar cambios de fondo, “para enfrentar la emergencia por el cambio climático y la pérdida de la biodiversidad”. Para lograrlo, se busca el relevo del modelo de extracción y la democratización del uso de energías limpias.
No al fracking. No a las fumigaciones con glifosato. Fortalecer la investigación y el conocimiento en los temas y las ciencias ambientales. Adelantar procesos de restauración ecológica. Son solo algunos ejemplos de objetivos de grandes implicaciones y múltiples frentes.
¿Conoces algo de la apuesta ambiental de Petro y Francia?
Acelerar la transición energética es uno de los propósitos claves en el camino de lograr el desarrollo de una nueva economía en el país.
La propuesta levanta recias discrepancias por parte de los sectores que parasitan alrededor del saqueo de los recursos y de su explotación descontrolada.
Uno de los ejes de la reforma tributaria que cursa en el Congreso es la protección del medio ambiente. Algo que explica la férrea oposición de personajes como el expresidente César Gaviria, del Centro Democrático, y de los demás partidos de derecha y extrema derecha.
Y de los gremios, tan determinantes y exitosos en la definición de las políticas macroeconómicas, y un fiasco para la realidad económica y ambiental de los colombianos.
De ahí, también, la infamante carta de doce agremiaciones de multinacionales a altos funcionarios del Gobierno estadounidense, solicitando la mediación para que frene la reforma.
La transición energética es atacada a través de los grandes medios, directa o indirectamente vinculados a intereses perjudicados por la medida en ciernes.
¿Colombia debe depender menos de energías no renovables como el petróleo?
China y Estados Unidos son los dos mayores emisores de gases de efecto invernadero. Estados Unidos produce el 14 % de esos gases y China el doble. Colombia genera apenas el 0.2 por ciento.
Sin embargo, los costos generados por el cambio climático afectan con especial dureza a los países pobres. Los compromisos ambientales están distribuidos de manera desigual en el mundo.
Desde la candidatura, Petro y Francia se destacaron por la solidez de la propuesta ambiental.
El reto ahora para el Gobierno de Gustavo Petro, asumida la presidencia, es empezar a efectuar las necesarias transformaciones en el difícil contexto económico del país.
¿Es posible conciliar las urgencias económicas con las prioridades ambientales?
Una poderosa élite se opone con fuerza a la menor variación en las reglas económicas. A lo que se suma el déficit fiscal, por encima de los cinco billones de dólares, que dejó el Gobierno de Iván Duque.
Las exportaciones de petróleo crudo y oro rondan los diez millones de dólares, y ambos rubros superan el 30 % del total de las exportaciones del país. O sea, hablamos de verdaderos puntales económicos.
La propuesta ambiental de Petro, que cruza todas las esferas de su Gobierno, deberá sortear desafíos considerables. Y lograr equilibrios que no lesionen esa compleja situación económica actual.
¿Quiénes podrían torpedear la propuesta ambiental de Petro?
El nuevo Gobierno colombiano se plantea liderar una agenda climática internacional, Más allá de las acciones concretas que empiezan a definirse.
La vicepresidenta Francia Márquez es premio Goldman, una especie de Nobel medioambiental concedido a defensores de la naturaleza y el medio ambiente. Ella, desde muy joven, ha sido una luchadora por las causas ambientales.
Pero no se trata solo de Francia. En el equipo de Gobierno figuran personas relevantes en materia ambiental, incluida la propia ministra, Susana Muhamad.
Convertir a Colombia en un país «líder en la lucha contra el cambio climático” es un propósito ambicioso ¿Hasta dónde podrá llegar? ¿Qué impacto real alcanzará Petro con un enfoque que enfrenta intereses tan poderosos a nivel global?
De lo que consiga hacer en Colombia dependerá la respuesta a esos interrogantes.
¿Colombia alcanzará el liderazgo en la lucha contra el cambio climático?
El presidente Petro y su equipo se proponen satisfacer los acuerdos suscritos por Colombia en las cumbres climáticas.
El Acuerdo de París de 2015, figura entre los pactos por cumplir. El Acuerdo plantea soluciones coordinadas en todos los niveles y establece medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Una de las primeras acciones concretas del nuevo Gobierno, en materia ambiental, tiene que ver con la ratificación del Acuerdo de Escazú, el primer tratado ambiental de América Latina y el Caribe.
Entre los objetivos figura la protección del medioambiente, el acceso a la información ambiental, y las garantías y defensa de los líderes sociales.
En la nueva visión gubernamental, se trata de trabajar los procesos socioambientales desde los propios territorios. Una estrategia con pocos antecedentes en Colombia.